Solíamos ser perfectos juntos, teníamos el mundo entero en nuestras manos, no había ningún límite para nosotros, y de alguna manera lo echamos todo a perder.
Creo que buscar culpables es una pérdida de tiempo, la culpa es compartida, cada uno destruyó lo que solíamos ser.
Nos causamos tanto dolor que probablemente nunca volvamos a mirarnos a la cara. Somos solamente dos extraños que se conocen muy bien.
No te quiero conmigo, las heridas nunca terminarán de sanar por completo, pero me causa un dolor desgarrador saber que la persona a quien más amé en este mundo, ni siquiera volverá a ser mi amigo algún día.
Los buenos recuerdos, las memorias construidas, permanecerán siempre, pero lamentablemente quizás, no soy de esas personas que tienen memoria selectiva, así que tanto lo bueno, como lo no tanto, se quedará conmigo.
Lo más probable es que jamás leas esto, pero quiero que sepas de corazón que te disculpo por el dolor causado, porque sé que no fue realmente tu intención. Espero algún día tú también puedas perdonarme a mí por todo el dolor y molestias que haya podido ocasionarte.
Sinceramente quiero que seas feliz, con quien que sea, no podría querer otra cosa para ti.
Espero algún día puedas recordarme quizás con algo de cariño, porque a pesar de que no queda nada de amor por ti en mi alma, sé que en el futuro te recordaré y no me arrepentiré de nada de lo que fuimos, aunque todo se haya ido.
Aunque no puedas leer esto, esta es mi despedida, una que alargué mucho. Me despido de ti, y me despido también de una parte de mí. Hace mucho que terminó este capítulo, hace mucho que intento ser feliz, pero siento que esto es lo que debo hacer para desprenderme de verdad. Las palabras siempre han sido mis amigas, y son ellas las que me sanarán.
Hasta siempre.
0 comentarios:
Publicar un comentario